En el friso ritual de mi vida
centellean las burbujas
y el sagrario espejea magia
nodriza de la vigilia
mientras el gladiador y la cariátide
centinelas del oráculo
agitan talismanes
para unir los fragmentos
fraguando la dicha.
En la certeza de armar el acertijo
avivo la hoguera
donde comienzan su travesía
y las ardientes visiones
en cada hijo que nombro
tapizan de amor
los presagios conjurados.
Este poema se los dediqué a mis hijos Matías y Maia, mi más amada obra.
Esa foto tiene copyrights! je
ResponderEliminarGracias por el poema